Un poquito de historia no?
Bueno, la verdad es que con lo de La Academia se me fue el tornillo, llevo muchos días sin bailar y tampoco sin pensar mucho en el Flamenco.
La verdad es que estoy aterrorizada, es que todo se me vino encima porque tengo todo para lanzarme con La Academia, ganas, ahorros, una super socia de carrera extraordinaria, alumnas, contactos. . . pero me cuesta sentirme profesora, la verdad es que me siento lejos de serlo, soy una aparecida en este arte que se ha llevado las vidas de mucha gente. . . pero creo que mi aporte va por el lado de introducir a las personas en el camino de aprender y gozar aprendiendo.
Que va, les cuento mi historia.
Toda la vida me ha gustado el baile, desde que tengo uso de razón que estoy haciendo coreografías y mirando todos los pasos de todos los bailes, pero nunca me sentí apta para hacerlo, era (y soy) demasiado alta y nunca pensé que podía bailar profesionalmente, miraba a las bailarinas y suspiraba...... será en otra vida.
Hasta que por las cosas de la vida, terminé viviendo con 2 bailarinas brasileras en Punta Cana, trabajabamos juntas en un hotel, y cada vez que faltaba alguna bailarina, me mataba por aprenderme su papel y candela!!!!!!!! nos vamos al escenario.
Volví a Chile directamente a tomar cursos de ballet y danza al Espiral, a los 24 años, tardeeeeeeee tarde, pero yo sentía que no era tarde. Y mi profe también daba clases en el Luna Calé. Y de tanto mirar a las gitanas guapas que entraban y salían dije, venga, esto si que es lo mío.
De esto hace ya 5 años, nada, me encandilé, desde que me puse los zapatos me di cuenta de que esta era la forma de expresión que mas me acomodaba, más que eso, la que más me interesaba de todas las que había visto y sentido, es que te agarra de una forma que se mete en tu cuerpo y finalmente te logra sacar el sentimiento mas profundo sólo bailando, sólo escuchando, sólo mirando.
Y desde ahí comenzó la carrera, con unas ganas locas de estudiar, de entrenarme, de formarme. Partí a Cuba, a estudiar Flamenco!!!!!!!!! esta se volvió loca (me lo dijeron muchos) pero la verdad que ese país recién me dio la base en el ballet, flamenco y danza para comenzar a sentir y dominar mi cuerpo. Luego de eso lo que sigue son cursos, viajes a españa, lecturas, internet y mucha disciplina para seguir y seguir aprendiendo.
Lo unico que les puedo ofrecer hoy, en La Academia y en este blog, es compartir con ustedes lo que he visto y me ha echo sentir el flamenco.
La verdad es que estoy aterrorizada, es que todo se me vino encima porque tengo todo para lanzarme con La Academia, ganas, ahorros, una super socia de carrera extraordinaria, alumnas, contactos. . . pero me cuesta sentirme profesora, la verdad es que me siento lejos de serlo, soy una aparecida en este arte que se ha llevado las vidas de mucha gente. . . pero creo que mi aporte va por el lado de introducir a las personas en el camino de aprender y gozar aprendiendo.
Que va, les cuento mi historia.
Toda la vida me ha gustado el baile, desde que tengo uso de razón que estoy haciendo coreografías y mirando todos los pasos de todos los bailes, pero nunca me sentí apta para hacerlo, era (y soy) demasiado alta y nunca pensé que podía bailar profesionalmente, miraba a las bailarinas y suspiraba...... será en otra vida.
Hasta que por las cosas de la vida, terminé viviendo con 2 bailarinas brasileras en Punta Cana, trabajabamos juntas en un hotel, y cada vez que faltaba alguna bailarina, me mataba por aprenderme su papel y candela!!!!!!!! nos vamos al escenario.
Volví a Chile directamente a tomar cursos de ballet y danza al Espiral, a los 24 años, tardeeeeeeee tarde, pero yo sentía que no era tarde. Y mi profe también daba clases en el Luna Calé. Y de tanto mirar a las gitanas guapas que entraban y salían dije, venga, esto si que es lo mío.
De esto hace ya 5 años, nada, me encandilé, desde que me puse los zapatos me di cuenta de que esta era la forma de expresión que mas me acomodaba, más que eso, la que más me interesaba de todas las que había visto y sentido, es que te agarra de una forma que se mete en tu cuerpo y finalmente te logra sacar el sentimiento mas profundo sólo bailando, sólo escuchando, sólo mirando.
Y desde ahí comenzó la carrera, con unas ganas locas de estudiar, de entrenarme, de formarme. Partí a Cuba, a estudiar Flamenco!!!!!!!!! esta se volvió loca (me lo dijeron muchos) pero la verdad que ese país recién me dio la base en el ballet, flamenco y danza para comenzar a sentir y dominar mi cuerpo. Luego de eso lo que sigue son cursos, viajes a españa, lecturas, internet y mucha disciplina para seguir y seguir aprendiendo.
Lo unico que les puedo ofrecer hoy, en La Academia y en este blog, es compartir con ustedes lo que he visto y me ha echo sentir el flamenco.
4 Comments:
Carola:
Una sorpresa y un gusto encontrar tu blog. Esto de la blogosfera es una locura. Siempre uno se encuentra con gente nueva y a veces, con gente que ya conoce.
Bonita tu historia con el flamenco, yo todavía no posteo cómo llegué a la música, y a la guitarra.
Respecto de lo que comentas en el blog de Pía, yo creo que los españoles (y andaluces) son demasiado cerrados de cabeza como para pensar que el flamenco puede recibir algún aporte desde latinoamérica. Además, acá lo que menos se hace es aportar, sino que imitar. Curiosamente, donde más podríamos aportar, que es desarrollando y trabajando más los palos de ida y vuelta, como las granaínas, colombianas, vidalitas, milongas, entre otras, es donde menos ahínco le ponemos. En cambio, le damos y le damos a las bulerías, soleares, tangos y alegrías.
Saludos
Hola Carola:
De cómo llegue a tu blog:
Sencillo, navegando por el frió mundo de la informática. (es decir por el WikiGDU).
Niña, comparto contigo, el amor hacia el flamenco, y quizás también hacia el arte en todas sus expresiones.
Me quede pensando en tus palabras, que de algún modo me reflejan. ¿Cuántas veces no me cuestione?, pucha, si soy tan chica, si mi cuerpo no es precisamente el de una bailarina, mis pies no tienen la agilidad que quisiera que tuvieran....en fin, hay tantos “pucha....si soy.” en mi discurso. Pero los que realmente vibramos con este arte, de una u otra forma sentimos que es una energía que no podemos parar y que es más que técnica, y virtuosismo.
No se si te sirve de algo....pero cuando tome conciencia realmente de lo que quería y también de lo que podía hacer respecto a la danza (dada mi naturaleza física y condiciones personales), volví a mi centro, más renovada, y con más fuerzas para retomar el flamenco...y de eso pasaron algunos años.
Te deseo la mejor de las suertes en este proyecto.....y Ole, Ole, Ole.....
Paola
Con tu pasión y resolución llegarás a cualquier parte; sigue adelante que ya es un deleite seguirte los pasos.
Fe de erratas:
En el comentario anterior quise decir "Guajiras" en lugar de las Granaínas. Las Granaínas son de Granada, valga la redundancia.
Espero que los aficionados flamencos se atrevan más a aportar desde la raigambre latinoamericama, siempre respetando la escencia del arte flamenco, claro está.
He pasado dos veces apurado por Manuel Montt con Eliodoro Yáñez y te he visto con unos maestros arreglando una casona vieja. ¿En qué estás?
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